Este jueves, Corea del Norte arrojó un misil hacia el mar de Japón, luego de que este miércoles lanzará al menos 23 proyectiles; de los cuales, uno cayó muy cerca de las aguas territoriales de Corea del Sur. Situación que el presidente Yoon Suk- Yeol calificó como “una invasión territorial de hecho”.
A su vez, el ministro japonés de Defensa indicó que el misil lanzado por Pyonyang no voló por encima de Japón, aunque se habían dado avisos previos a la población de las regiones septentrionales.
Expertos en este tema han considerado las acciones de Pyongyang una respuesta agresiva y amenazante ante los ejercicios militares llevados a cabo por Estados Unidos y Corea del Sur.
Por su parte, el portavoz del Consejo Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, reprobó y consideró aventurada la decisión de Pyongyang de disparar un misil cerca de las aguas territoriales de Corea del Sur.
Del mismo modo, Kirby reveló que su gobierno tiene información de que Corea del Norte suministra a Rusia, de forma encubierta, un número importante de proyectiles de artillería para su guerra con Ucrania.