El Informe sobre la evolución de los delitos de odio en España 2021, elaborado por la Oficina Nacional de Lucha contra los Delitos de Odio (ONDO) a partir de los datos facilitados al Sistema Estadístico de Criminalidad (SEC) por Policía Nacional, Guardia Civil y las policías autonómicas y municipales, muestra que en España en 2021 las infracciones penales e incidentes de odio tuvieron un aumento del 5.3% respecto a 2019.
Además de que siguen presentando una tendencia a la alza. La cual se inició desde 2014 y que se detuvo momentáneamente en 2020, debido a los confinamientos.
También trascendió que alrededor del 80% de estos delitos, nunca son denunciados por las víctimas y que los datos reales pueden ser aún mayores.
Asimismo, se informó que en 2021, se investigaron 1802 infracciones penales e incidentes de odio en España; esto es un 5.6 % más que en 2019. Las motivaciones de estos delitos fueron por motivo de orientación sexual o identidad de género de la víctima.
La mayoría de estos hechos violentos, suceden sobre todo en la calle, e incluyen: lesiones a las víctimas, amenazas, daños materiales, e injurias.
Al respecto, el ministro del interior de España, Fernando Grande Marlaska, señaló que los delitos de odio son “acciones dirigidas contra personas concretas, pero cuyo objetivo último es también generar sentimientos de miedo e inseguridad en el colectivo social al que pertenece o al que le vincula el agresor. Y esa es la razón por la que constituyen una grave amenaza para la seguridad del conjunto de la sociedad, porque agrietan de manera peligrosa la convivencia pacífica de la ciudadanía».